Aventuras de un Maestro

Después de todo el viernes no fue tan apático, previniendo algo bueno, se me ocurrió ponerme una linda falda algo corta y cuidando que mi aspecto fuera pulcro, pues tendría clase de video, y como mi anterior maestro de computación también esta en el taller, me sugirió que me uniera a su equipo, pues tenía la idea de realizar un documental sobre la “fast food” contra la comida natural y regional. Yo le dije que si, imaginándome el plan con maña. Cuando llegué a la escuela, vi al cineasta que nos da clase y me saludó de beso, cosa que nunca hace, después me encontré a un amigo fotógrafo (que esta sabrosón, pero con el que nunca he cruzado palabra) de mi cuñado, que hasta me hizo platica, ¡vaya! Si que dio resultado la falda y el maquillaje!
Como no había comido me moría de hambre y me había acabado el dinero que llevaba gracias a que había comprado unos libritos.
Entre mis demás compañeros se nos ocurrió que sería buena idea después del taller irnos a tomar unas cervecitas, yo dije que si, advirtiendo que no llevaba dinero, así que mi maestrin se ofreció a invitarme, jejejeje! Eso me agradó. Nos fuimos a un bar junto con Chucho, que por cierto es de lo más perro con todas las mujeres, y que al llegar al bar terminó arrepintiéndose y me dejó sola con el profe ups! Obviamente me sacó de onda, pues me sentí incomoda al cabo de la primer cerveza, por suerte llegaron otros dos de mis compañeros, y el ambiente se tornó más suave, dí gracias al cielo, y el profesorcito empezó a echarse sus rollos, en la platica salió que uno de ellos es mesero en una disco, y respecto al tema admití que no conocía el antro donde trabajaba, porque no tengo con quien ir, entonces la pregunta fue obvia los tres hombres que estaban conmigo me preguntaron “¿cómo que no tienes novio?” fue un momento Ripley, no, no tengo novio, aunque usted no lo crea! El profesor interrogó quien era con el que me había visto cuando le pedí ayuda con un trabajo de video. Respondí que si tuviera novio, en esos momentos no estaría con ellos. Después de mi respuesta, al instante comentó dirigiéndose a uno de mis compañeros “yo corté con mi novia hace tres meses”. En mis adentros dije “¿y quien te preguntó?”, fingí hacerme la desentendida y guardé silencio aguantándome una sonrisa mustia, comprendí el mensaje perfectamente, teníamos buenas señales con el susodicho maestro, hasta que terminó balconeándose solo cuando contesto su teléfono frente a nosotros, era una mujer que le preguntaba donde estaba, le llamó dos veces más, ¡uy no! Así como! Solito se echó de cabeza, una verdadera lástima, ya que no esta nada mal, e indiferente yo creo que no le soy, jejejeje!
Nos vemos hasta el próximo blog, esperando tener mejores noticias.(Aunque sea un desliz, no mejor no, una gran desliz! ups!)
Atte. “La Vicho teacher”